marzo 27, 2011

Todo es cuestión de perspectiva

Como muchos temas de trascendencia o de cotidianidad, como algunos acontecimientos que pueden o no ser históricos, siempre he creído que la importancia de lo que sucede es aquella que nosotros le impregnemos.

Así como la visita de Obama que tanto interés, crítica e incluso emoción causó en los diferentes círculos de la vida nacional, con gente vendiendo camisetas con el rostro del mandatario incluidas. Unos monitoreando cada paso que daba en nuestro país, otros intentando ignorarlo. Al final, siempre supieron algo cuando intentaron refugiarse en el Twitter (saludos a usted que le pasó eso).

Todos teníamos una expectativa, no hay duda. No siempre ocurre que nos visite un presidente de Estados Unidos (este comentario va sazonado de la significación que por años se ha dado del "hombre más poderoso del mundo"), ni mucho menos que ocurran tantos cambios antes de su llegada.

Es cuestión de perspectiva, pero también de experiencias. Como el hecho de "vivir en democracia" y sentirse en la realidad, en un tiempo-espacio ajenos a esa "realidad" que escuchamos mencionar a diario.

Así también el derecho, que es tema cotidiano en estos días. Tomando en cuenta que también las leyes son interpretadas y que sin embargo, tienen un campo de acción que según entiendo, es dónde debe manejarse por los profesionales del área (es decir, no es cuestión de inventar lo que uno quiere entender).

Así como lo "mío", lo "tuyo" y lo "nuestro". Un día vamos a aprender que todo es cuestión de cómo querramos verlo, de qué es lo que vamos a compartir, que causa apoyaremos... Porque al final del día, debemos hacer un resumen de lo vivido y agarrar pan para su matata, como bien dice mi abuelo. Seguir pensando como gustemos, sin pasar por encima del otro.

Y sobre todo, saber que queremos y por qué lo queremos. No hay situación más triste que gastarse el aliento, la saliva y la vida apoyando lo que desconocemos. Todo es cuestión de perspectiva, pero no intentemos ver con los ojos de otro (no se confunda con la empatía, que es muuuy diferente). Saludos =)

marzo 25, 2011

Y usted, ¿por qué está en Twitter?

Pregunta que se me ocurrió hace unos días en la tarde, mientras observaba el flujo de tweets que hacían referencia, especialmente a la visita del presidente estadounidense, Barack Obama a El Salvador.

Y es que mucho se escucha a diario y en todos lados sobre el mentado Twitter. Casi todos lo conocen y muchos lo utilizan. Yo soy una reciente, muy reciente usuaria del mismo, que invitada en específico por el compañero Samuel Alemán alias "@SuiriHikari", me adentré en este mundo de pequeños mensajitos donde cada uno puede ser, decir, expresar o denunciar en 140 caracteres.

#YoConfieso que para no quedarme en la luna, efectivamente leí un poco acerca de esta red social antes de inscribirme. Aprendí de "hashtags" y "menciones", de "trending topics" y de "followers", hasta que me sentí lo suficientemente informada para saber cómo manejar mi cuenta.

Y sobre la utilidad, pues es bastante práctico, sencillo y adictivo. Se encuentra de todo tipo de personas para compartir ideas, chistoretes, opiniones... En fin, poner de cabeza al mundo si usted quiere, a través de lo que expresa.

Ya he visto desahogos de todo tipo, e incluso yo he vaciado mis sentimientos de impotencia ahí. Hay personas que se adentran en él, para saber qué es lo que deben de saber (lo actual, lo in) y otros que se molestan porque se habla de algo tooodo el día, parecido a una agenda setting establecida. Hablar de alternativas temáticas es difícil, la mayoría quiere protagonizar comentando del tema en boga.

Otros están en Twitter para conseguir cada vez más y más seguidores, al mejor estilo de la acumulación de riqueza del Tío Rico Mac Pato. Hacen hasta competencia con otros y lo hacen un punto a su favor en sus conversaciones cotidianas.

Se forman inclusive grupos de personas que comparten cierto interés y de ahí los nombres de sus grupos: los "ForeverAlone", "LaLigaDeLosChorys", "LaLigadelaCerveza", son solo algunos de ellos. Se reúnen, conviven y saben por fin, quién está detrás de los tweets con los que usted ríe, se indigna o se queda admirado.

En fin, es mil usos el Twitter. Para conseguir amigos, sentirse más cerca de su artista preferido (este, bueno pues...), para sentirse incluido en el grupo de sus amigos que comentan un tweet y se tiran una carcajada, para anunciar, vender, comprar, conseguir XD....

Y usted, ¿por qué está en Twitter?

marzo 21, 2011

De marchas, diálogos y otras cosas (1)

Creo que no fui la única que se enteró de alguna marcha hoy, ya sea porque estábamos en el lugar de los hechos o porque nos cenamos los 10 ó más minutos de noticias relacionados con ello.

Las marchas y protestas son una fuente de lucro para los vendedores que buscan refrescar al cliente con una buena minuta, un sorbete o una bolsa con agua. También para alguien que en realidad no quería llegar al trabajo y utilizó de excusa que "no pudo pasar por la marcha". Un daño para el medio ambiente con todo lo que queman en el camino, desde banderas, llantas, muñecos y otros. El reflejo del descontento de varios sectores que recurren a la denominada marcha o manifestación, como una especie de arma poderosa para que les escuchen, porque la experiencia les ha enseñado que a la autoridad, no le gusta el desorden (o no le conviene).

¿Cuál habrá sido el punto de quiebre para quiénes ahora piensan que salir a las calles y obstruir el paso es la mejor manera de hacer las cosas? ¿Será que ya no funcionó el diálogo o en realidad jamás funcionó? ¿Y a qué le llamamos diálogo?

Todos (creánme), todos queremos algo con todas nuestras fuerzas en esta vida: Un mejor empleo, salario, casa, etc. Dicen que la inconformidad es parte de la naturaleza del ser humano, curioso razonamiento si nos ponemos a pensar y pesar en la balanza de la señora justicia nuestra situación. Descubriremos que, efectivamente, hay otro que está más "fregado" y que sin embargo, le sonríe a la vida. Sigue adelante. Lucha por sobrevivir, muchas veces, pero no detiene su ánimo de trascender.

No pido que todos seamos iguales y andemos una sonrisa guardada desde anoche en la refrigeradora, ni mucho menos que dejemos de lado el luchar por lo que creemos y queremos y SOBRE TODO nos merecemos. Excelente, apoyo esa noción. Tampoco se malinterprete como un llamado al conformismo mental.

Pero hay que saber hacerlo y tener "convicción propia para"... Ser coherentes con nuestras palabras, pensamientos y acciones. No salir a marchar o a manifestarse por "hacer bulto" y salir en las noticias., sin saber siquiera por qué estamos ahí asoleándonos No coartar los derechos de ese "pueblo" por el que decimos luchar, llegando a batallas campales en plena efervescencia de la adrenalina. Tener empatía con los que nada tienen que ver en el problema, créame que esa buen acción se le devuelve.

Saber que, tanto para la violencia repentina como para el diálogo, se necesitan 2. Que la violencia, efectivamente, engendra más violencia, y que en el diálogo debe existir una negociación, no una imposición de condiciones. Como decía uno de mis licenciados hace tiempo, tenemos problema de interpretación de los términos como el proletariado, la lucha social, el movimiento revolucionario, los derechos y algunos otros.

Y antes que se me pase, no crean que defiendo a los demandados: grandes empresas, el gobierno,etc, etc, etc. Ellos van para otra entrada, porque por hoy, es todo. No vaya a ser que armen una ciber marcha contra mí XD y si lo hacen me avisan. Saludos.

marzo 18, 2011

BELIEVE

Palabrita que está de moda hoy que viene Mr. Obama...

Creer es el paso posterior o anterior al "querer", como usted quiera creerlo, o como usted crea quererlo =) palabritas presentes en uno de mis poemas preferidos, que alguna vez espero compartir con ustedes.

Creer se nos hace difícil sin pruebas. Como en un juzgado donde "cualquiera es inocente mientras no se demuestre lo contrario", y que recientemente nos demostró que aunque sea 12 años más tarde, se logra demostrar la verdad y condenar terrenalmente el mal cometido (Véase caso Katya Miranda).

Creer es complicado también cuando otros no creen, porque aunque seamos entes pensantes, de vez en cuando se nos escapa la individualidad y nos hacemos "bolita" para sentirnos "en", "incluidos", "parte de"...

El creer es una estrategia publicitaria y política que pocas veces falla (al menos cuando no es ud un candidato predecible y/o conocido): Mire Mr. Obama, los hizo creer y "Yes, he can" ^^

Creer es a veces, una necesidad. Yo creo que siempre es necesario, aunque a veces nuestro objeto de motivación (persona, situación, etc) sea algo móvil, pasajero, como la rosa efímera de "El Principito". Quizá lo que haga falta es "no clavarse" y saber que a pesar de todo, seguiremos adelante, porque lo que hoy fue importante, puede que mañana ya no esté, o que nos alejemos del mismo.

Creer es importante. Miren al Santa del "Milagro en la Calle 34" lo sacó de aguas XD, creer nos hace sentir que tenemos un respaldo donde caer sentados cuando el cansancio nos pase factura.

Creer es uno de los dos ingredientes para que todo funcione. El otro, es la acción.

Creer es básico para nosotros, los humanos, porque soñamos y deseamos. Y si creemos en lo que soñamos, nos encontramos en la lucha cotidiana, desde sus trincheras cada quien, por ser lo que deseamos ser.

Bien dicen que la peor crisis que podríamos pasar es la de no creer y sacar el "believe" del "Oceano Dictionary" (o el de su preferencia) y de nuestras vidas. Porque perderíamos todo sentido del "ser"...

Creer es como evitar, entonces, una catástrofe. El mundo es de los que creen en hacerlo mejor y luchan porque así sea; y de los que superan la creencia que pudiésemos tener por un tiempo errónea, de los que superan las barreras de las creencias tradicionales y hacemos un mix de lo mejor de lo mejor (así como los de Navidad y Año Nuevo XD).

Crea, cree, utilice su creatividad y describamos al mundo. Así sabremos para dónde vamos y encontraremos la forma de llegar. Saludos especiales!

marzo 09, 2011

Y se dio la toma, pues.

Vaya hoy les contaré sobre mi decepción cuando encontré la Universidad de El Salvador (mi centro de estudios) cerrada, de la frase sobre el oficio más antiguo del mundo que emanó mi boca y expresividad en el momento, encontrándome con un mar de alumnos que como yo, esperaban no sé qué cosa frente a los portones de las diferentes entradas.

Y vaya, ya parece que le voy a reservar una entrada al año a esta problemática, porque ya es costumbre, triste costumbre. Sólo tengo algunos puntos que agregar:

1. 2011 y 2012, años pre y electorales en la UES. El Rector debe cuidarse si quiere ser reelecto y demostrar su valía para el cargo. Y las organizaciones que ya salieron desvinculándose de la toma del campus también participarán en las elecciones: yo la verdad, no veo la utilidad de los estudiantes en Junta Directiva o en el Consejo Superior Universitario, porque no hacen nada.

2. Creí que los shows políticos se los dejábamos a otras instancias (como la Asamblea, por ejemplo). Me equivocaba.

3. ¿Quiénes están dentro de la U? Muchachitos que desean entrar, arrojados por un sistema educativo que les deja pasar de grado con nota de 5 (por testimonio de mi madre que es profesora), que sacan notas de MENOS DE 1 en el examen de admisión de la UES... Mire, si las carreras profesionales NO SON COMIDA DE HOCICONES...

4. La verdad, les diría a los niños que están siendo manipulados que no se dejen. El estigma del proceso alternativo ya no se lo van a quitar después y es un desgaste para usted como individuo PENSANTE y para sus compañeros estudiantes que tenemos derecho a entrar a la U.

5. Cuánto va a durar hoy el drama, no sé. En mi caso, tenemos tarea para rato, así que mejor me concentro en eso. Discúlpeme, pero es mi sincera opinión y mi blog no se lo van a tomar, asi que se fregaron... Jajajajajaja.

Saludos

marzo 07, 2011

Crónicas de una viajera- Día 2: De tratados y otros diretes...

Hoy está de moda el establecimiento de pactos, mesas de diálogo y acuerdos en compañía de botellas con agua, cafecito y revistas para que la espera no sea tan larga (en apariencia).

El de los buseros la semana pasada fue uno de ellos. Tanto cambio por hacer me parecía increíble, hasta que un par de días atrás me subí a un bus con el techo y asientos flojos, lleno hasta que, probablemente por el calor de tanta gente, se dilató y las filas de gente parada ya no se sentían tan apretadas.

Mientras los señores empresarios discutían en una mesa, una amiga se bajaba apresuradamente de una unidad de la Ruta 38. Se prendió en llamas en pleno viaje, y no les quedó más que bajarse a cambiar de bus; era lo más lógico, quizá lo único que podían hacer.

Mientras se espera que se cumplan, siguen sucediendo accidentes. La inseguridad sigue reportándose en las unidades (me diría Genaro: Pero ese es problema de la policía), ahh pero le cuento que algunos (no todos) de sus trabajadores están de acuerdo con algunos ladroncillos para repartirse el botín que salga entre todos los pasajeros de un viaje...Uno de mis compañeros de estudio fue víctima reciente del robo de su bolsón. Si es algo "pequeño", pero robo al fin.

Créanme, como persona y pasajera les quiero tener fe... Pero ayúdame que te ayudaré.

PD: Por cierto, tengo ganas de tratar un tema que después de chorromil años por fin está en agenda: La cuestión del Bajo Lempa vista de una manera más integral que el problema anual de inundaciones en invierno. Vamos a ver cómo lo abordamos, ya que investigamos junto a otros compañeros este tema el ciclo anterior y quedé sorprendida. Saludos ^^

marzo 02, 2011

Crónicas de una viajera- Día 1: Es cuestión de estrategia...

Sí, como en cualquier otra labor a emprender con una meta a alcanzar, todo es cuestión de estrategia...

Viajar en bus se ha hecho cotidiano, ya que en mi localidad no hay súper, ni hospital, ni mucho menos un parque o un lugar tranquilo donde relajarte el fin de semana y salir de la rutina. Para ir a la universidad y a los eventos que hay que cubrir para la revista AXZero... Cuestiones de la vida, comencé a utilizarlos yo solita cuando grande y aún no me acostumbro a llevar un asiento vacío a mi lado, donde generalmente estaba mi padre o madre.

Pero en este corto tiempo (lo considero así) he aprendido cosas fundamentales, principios básicos para sobrevivir al viaje. Me he formado mi estrategia personal que comienza desde que coloco mi pie en la grada del bus, hasta que lo abandono por completo.

Por ejemplo, acostumbro fijarme bien en mis compañeros de viaje por muchos motivos, desde observar que no sea de malas mañas, hasta saber en dónde se baja. Suena malvado pero el saber que un señor siempre se baja en Galerías Centro es útil si quiero conseguir asiento pronto y llegar sentada a mi destino habitual; además el saber ubicarse cuando uno va de pie es básico: De preferencia, no sea parte de la segunda fila (o sea ya en medio) y mucho menos de la tercera (que quien sabe cómo se forma), buscar espacios y aferrarse a ellos.

De igual manera, aferrarse a la barra superior que sirve de "agarradero" como a la vida. Porque en serio y a menos que vaya bien apretado por todos lados, ese asidero le puede salvar de salir volando de manera indeseada.

Muy importante: Prepararse física y psicológicamente para todo (TODO) en el trayecto. Evalúe según sus horas de viaje, ya sean horas "pico" o "muertas" para llevar esa blusa preferida, esos zapatos que no quieren "bautizo obligado" por los pies de desconocidos, etc.

Fundamental señoritas: Carteras cerradas, el bus NO es pasarela (no se expongan), señores no sean patanes y se aprovechen de la llenazón del bus.

Cada quién tiene su método, lo repito: Es cuestión de estrategia. Al menos hace más llevadero el viaje.

marzo 01, 2011

Crónicas de una viajera- Día "cero"

Hoy después de haber vivido sendas experiencias poco agradables en mi transporte cotidiano (la ruta 11), me he decidido contar mi testimonio. Uno de tantos que a diario vivimos los que sí usamos el autobús.

Son reflejo de las vivencias enmarcadas en un nuevo contexto de transformación (dicen) del sistema de transporte. Cosas que pasan cada día, que las vivimos de distinta manera dependiendo del ánimo: Pasando del frenético grito de "dale, dale" al señor motorista cuando vamos tarde, o acelerados, o con ganas de adrenalina; hasta si andamos de mal humor y el individuo al mando en la unidad recibe su odio, o su tristeza. O al contrario, uno de esos "buenos días" que sólo he escuchado a uno de los conductores de mi querida ruta.

Son parte de la catarsis necesaria de vez en cuando, de la realidad que más allá de los compromisos y las mesas se vive en la calle. Podríamos llamarlo, locuras de una joven que está aprendiendo día con día del mundo, del país, de la política... del periodismo, para que esa "llama" o "demonio del periodismo" no se apague. (Saludos, Lic. Edgar Rivas)

Finalmente, me he decidido. A pesar de todo, hay aspectos positivos y negativos, curiosidades, consejos, estrategias... Horas de mi vida aprovechadas o desperdiciadas, pero al fin vividas.

Aquí vamos a contar este experimento. Espero que me acompañen en el trayecto y si quieren aportar, pues adelante. =)