agosto 15, 2010

...DESPUÉS (muuucho después...)

Bienvenidos nuevamente a este blog, como se acordarán (espero) debía aun una entrada de mi "trilogía de momentos".

Aunque comencé disertando sobre la libertad en su sentido más general, haciendo referencia a la discusión sobre la libertad de expresión que se desarrolla en casi cualquier lado y luego me salté a opiniones sobre la labor periodistica, regresaré en última instancia a las raíces de esta trilogía aplicando un poco de ella en eventos que han sucedido a mi alrededor en días recientes.

Quizá entre los más recientes es que me encuentro acá, escribiendo en el marco del Año de la Juventud días después de celebrarse la fecha dedicada a este sector poblacional...

Pues ese día, tuve la oportunidad de escuchar una pequeña parte de la charla que mantuvieron dos jóvenes con los locutores de un popular programa matutino acerca de variados aspectos de la realidad nacional; las opiniones de la gente no se hicieron esperar ya sea para felicitar a los invitados por su capacidad analítica u opinar sobre "x" o "y" punto.

Me llamaba más la atención el hecho de cómo se abordó, mas que los temas y coincidí en el punto de vista de un radioescucha pidiendo un auditorio más integral en cuanto a la gran diversidad que existe de opiniones. En cierto sentido, tenía razón, sin embargo, hay tantos puntos de vista como personas en el mundo y según razono de vez en cuando, es parte de la maravilla que trae consigo la libertad: La oportunidad de tener un punto de vista propio y a la vez responsable y constructivo... Y tal como lo dijera una de las ponentes, esta oportunidad no llegará así por así, hace falta un poco de motivación y búsqueda de los espacios para expresarlo si así se desea.

Eso me lleva al segundo acontecimineto, no tan reciente, pero enmarcado en el tema...

La semana anterior editaba una entrevista realizada a los chicos de una radio online que dirigieron un cinversatorio el mes pasado sobre el papel de los jóvenes en neustra sociedad como reales y creíbles factores de cambio. Debo confesar que me gustó mucho como se expresaron y el mensaje final que dieron a los presentes, por lo que fui a entrevistarlos al final de su disertación.

Lo importante de todo ello se resumía en el hecho de creer realmente en ser un factor de cambio, de estar conscientes de nuestra realidad, conociendola, criticandola e intentando cambiarla desde nuestros lugares, buscando las oportunidades o construyendolas uno mismo. Sueña utópico en ocasiones, especialmente para aquellos que no están del mejor ánimo, pero es real...

Decía uno de los chicos que los jóvenes tenemos la capacidad de deshacer y rehacer el mundo de nuevo, palabras que en más de un momento he puesto en tela de juicio dependiendo de donde vengan, tristemente acostumbrada a no escuchar este tipo de cosas...

Pues insisto, este es "el año de la juventud", que se tardó bastante en llegar si me lo preguntan, porque hay muchos que ya trabajamos o hacemos el intento por crear, escribir u opinar según nos lo dicta la razón (y a veces el hígado =S) pero aunque sean 365 días donde el mundo pondrá los ojos sobre este sector de personas, los cambios que querramos ver y la libertad que tanto se discute depende del empeño en defenderla, y no a través de protestas, confrontaciones físicas o pasando por encima de las leyes. Porque la prohibición de una u otra cosa solo causa revuelo en quien la practica y ve en ella, la única posibilidad de realizar lo que desea, cerrandole la oportunidad a otras opciones, quizá mejores ymás responsables.

Porque ejercer esa añorada libertad con responsabilidad y conciencia, no es coartarla, sino aprovecharla y canalizarla de manera positiva. (Si en este momento han puesto cara de "de cual se fumó", no, en realidad estoy hablando con el uso completo de mis facultades, lo que pasa es que de vez en cuando, le gana la seriedad a la ironía recurrente de mi expresividad... =) ) pero bueeenooo.....

Saluditos y gracias por leer esta entrada!! XD

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